Innovación en Tecnología de Membranas Poliméricas: Una Solución Prometedora para la Crisis del Agua
Por Patricia Moreno Sánchez
En un esfuerzo por enfrentar la creciente crisis mundial del agua, exacerbada por la sobreexplotación de acuíferos y otros factores, la doctora Olivia Hernández Cruz, del Centro de Pruebas Analíticas no Destructivas de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), está desarrollando una tecnología innovadora que promete ser un hito en la remoción de contaminantes del agua. Su proyecto, titulado “Membranas poliméricas biodegradables para la remoción de contaminantes en agua”, ya ha mostrado resultados preliminares prometedores, con la remoción de ciertos contaminantes en más del 90 por ciento, y ha dado lugar a una solicitud de patente.
Las membranas poliméricas diseñadas por Hernández Cruz consisten en nanofibras capaces de eliminar los colorantes vertidos por la industria textil. Estas membranas se incorporan en un dispositivo por el cual circula el agua contaminada, saliendo limpia al final del proceso. La tecnología no solo busca purificar el agua para su reutilización en la industria textil, sino también para otros sectores y actividades cotidianas.
Hernández Cruz, Nivel I del Sistema Nacional de Investigadores y egresada de la Licenciatura en Química de la BUAP con un doctorado en Ciencias por la UNAM, explicó que su interés en los materiales poliméricos tiene aplicaciones tanto biomédicas como ambientales. Su trabajo se enfoca principalmente en limpiar aguas contaminadas por la industria textil, con el objetivo de contribuir a la resolución de la escasez de agua limpia.
La necesidad de tales soluciones es urgente, como lo indican estudios que revelan que en la ciudad de Puebla se consumen anualmente 121.17 millones de metros cúbicos de agua, de los cuales solo el 0.85% es tratada y utilizada, principalmente para regar espacios públicos. «En este contexto surge la necesidad de buscar soluciones a la contaminación hídrica y promover prácticas más sostenibles en la industria. El impacto social del proyecto es significativo, ya que desarrollamos tecnología que podría resolver la crisis de agua que ya estamos enfrentando», comentó la académica.
El proyecto, iniciado a finales de 2022, cuenta con la colaboración de un grupo multidisciplinario de investigadores de la BUAP, UNAM y UDLAP. Entre los colaboradores se encuentran los doctores Jorge Raúl Cerna Cortez, Gerardo Córdova Pérez y María Ana Pérez Cruz, de la BUAP; Carla Dinorah Aguilar Lugo, de la UNAM; Miguel Ángel Méndez, de la UDLAP; así como el licenciado en Nanotecnología e Ingeniería Molecular Guillermo García Pérez, de la UDLAP; y los maestros Eric Reyes Cervantes y Gabriel Sosa Arellano, de DITCO-BUAP.
Actualmente, el equipo se prepara para iniciar pruebas con prototipos a nivel laboratorio. «Estamos trabajando en el diseño de nuevos prototipos para el montaje de los materiales que hemos desarrollado, con el objetivo de que sean más eficientes que los modelos actuales», señaló Hernández Cruz.
Este proyecto es crucial para asegurar la disponibilidad de agua limpia para futuras generaciones, reducir la presión sobre los recursos hídricos actuales y mitigar los impactos ambientales negativos. «Cada avance nos acerca más a una solución práctica y sostenible para la remoción de contaminantes en el agua utilizada por la industria textil», expresó la doctora Hernández Cruz, destacando la importancia de continuar innovando y adaptando la tecnología para lograr la máxima eficiencia y efectividad.
