Tercer domingo de Adviento: un llamado a la reconciliación y la paz
Por Patricia Moreno Sánchez
En la Catedral de Puebla, Monseñor Francisco Martínez Castillo, obispo auxiliar de Puebla, presidió la celebración del tercer domingo de Adviento, destacando este tiempo litúrgico como una oportunidad para reflexionar y prepararse espiritualmente antes de la Navidad.
Al encender el tercer cirio de la corona de Adviento, símbolo de alegría y esperanza, Monseñor Martínez recordó que faltan pocos días para el nacimiento de Cristo, invitando a los fieles a avanzar en el camino de la reconciliación y a abrir sus corazones a la presencia divina.
“Con la fuerza de Dios, los creyentes estamos llamados a actuar con mayor caridad y justicia, incluso en medio de nuestras limitaciones humanas. Frente a la violencia y la injusticia, debemos responder con paz y solidaridad, siendo un ejemplo de apoyo y compasión para los más necesitados”, afirmó durante su mensaje.
En la misa, Monseñor hizo un llamado a ser «artesanos de paz» en un mundo que enfrenta grandes desafíos.
En la misma celebración eucaristíca elevó oraciones especiales por los miembros del Consejo Coordinador Empresarial y recordó al exgobernador Miguel Barbosa Huerta en el segundo aniversario de su fallecimiento.
Asimismo, pidió por el descanso eterno de Benito Aguas Atlahua, diputado asesinado en Zongolica, Veracruz, y Edmundo Román Pinzón, magistrado asesinado en Acapulco, Guerrero, junto con todas las personas fallecidas que dejaron huella en sus comunidades.
El obispo auxiliar concluyó su homilía destacando que el Adviento es un tiempo para renovar la fe, reforzar el compromiso con los valores cristianos y prepararse para recibir el mensaje de amor y esperanza que trae consigo la Navidad.