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Real Madrid niega haber considerado no jugar la final de Copa del Rey tras tensión con el arbitraje

El club merengue desmiente rumores sobre una posible ausencia en la final contra el Barcelona en medio de una fuerte polémica por declaraciones de los árbitros designados.

Por Luis Moreno

En medio de una intensa polémica que ha empañado las horas previas a la final de la Copa del Rey, el Real Madrid emitió un comunicado oficial desmintiendo que en algún momento se haya planteado no disputar el encuentro contra el FC Barcelona, programado para este sábado en el Estadio de La Cartuja, en Sevilla.

«Nuestro equipo nunca se ha planteado renunciar a jugar la final», afirmó el club blanco, en respuesta a los rumores que circularon tras la ausencia de sus representantes en los actos protocolarios previos, como la rueda de prensa, el entrenamiento oficial y la cena de gala.

La tensión estalló tras las declaraciones del árbitro principal del partido, Ricardo de Burgos Bengoechea, y del encargado del VAR, quienes, visiblemente afectados, denunciaron en rueda de prensa el constante hostigamiento por parte de Real Madrid TV. De Burgos, con lágrimas en los ojos, relató cómo su familia ha sido blanco de insultos por los señalamientos del canal del club, y su colega González Fuertes advirtió que el estamento arbitral está al límite: “Un día va a pasar una desgracia de verdad”, declaró.

En un comunicado anterior, el Real Madrid calificó como «inadmisibles» dichas declaraciones, señalando una “clara y manifiesta animadversión y hostilidad” por parte de los árbitros designados hacia el club. Además, sugirió que las palabras fueron realizadas con “premeditación” y con la intención de influir en la opinión pública justo antes de la final.

El presidente de la Federación Española de Futbol (RFEF), Rafael Louzán, intentó enfriar los ánimos haciendo un llamado “a la responsabilidad y la tranquilidad”, descartando cambios en la designación arbitral. Por su parte, Javier Tebas, presidente de LaLiga y crítico habitual del club blanco, acusó al Real Madrid de “presionar, amenazar y castigar” en lugar de contribuir a una mejora real del fútbol.

Mientras tanto, el Celta de Vigo aprovechó el caos para bromear en redes sociales con una supuesta convocatoria para reemplazar al Real Madrid en la final, publicando: “¿Puedo intentarlo?”, en referencia a su eliminación previa en el torneo a manos del conjunto merengue.

Pese al ambiente tenso, el Real Madrid concluyó su comunicado reiterando que, por respeto a los millones de aficionados y a la trascendencia mundial del encuentro, acudirá a disputar la final. El balón rodará en La Cartuja con los focos no solo en el terreno de juego, sino también en cada decisión arbitral.

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