México evita recesión técnica, pero inflación repunta y complica panorama económico
Por Luis Moreno
La economía mexicana logró sortear una recesión técnica durante el primer trimestre del año, al registrar un crecimiento marginal de 0.2% respecto al trimestre previo, impulsado principalmente por el sector agropecuario, informó este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Sin embargo, el repunte de la inflación por encima del objetivo del Banco de México genera incertidumbre sobre la trayectoria de la política monetaria.
El Producto Interno Bruto (PIB) del país avanzó un 0.6% a tasa anual en términos reales, gracias a un sólido desempeño de las actividades primarias —con un crecimiento de 7.8%— que contrarrestó la caída en los sectores industrial (-0.1%) y de servicios. A pesar del modesto avance, expertos advierten que el crecimiento sigue siendo débil y vulnerable a factores externos como la incertidumbre comercial con Estados Unidos.
Mientras tanto, la inflación volvió a acelerar y se ubicó en 4.22% a tasa anual durante la primera quincena de mayo, el nivel más alto en lo que va del año y superior al 4.01% esperado por el mercado. Este incremento, el mayor para este periodo desde 2020, supera el rango objetivo del Banco de México, que establece una meta del 3% con un margen de un punto porcentual al alza o a la baja.
Entre los productos que más presionaron los precios se encuentran el pollo (+8.96%), el jitomate (+4.37%) y la papaya (+16.25%). La inflación subyacente, que excluye bienes y servicios volátiles, también aumentó por cuarta quincena consecutiva a 3.97%, mientras que la inflación no subyacente alcanzó 4.78%, impulsada por un alza de 5.79% en productos agropecuarios.
Pese al repunte inflacionario, analistas de firmas como Capital Economics consideran que el Banco de México (Banxico) mantendrá su ciclo de recortes a la tasa de interés, previendo un nuevo recorte de 50 puntos base en la reunión de junio. Actualmente, la tasa clave se sitúa en 8.5% tras tres recortes consecutivos.
No obstante, algunas voces como la de Gabriela Siller, directora de análisis económico de Grupo Base, advierten que “con la inflación encima del 4%, el Banco de México debería hacer una pausa” para evitar riesgos de desanclaje en las expectativas de inflación.
El entorno económico, marcado por un crecimiento tenue y una inflación por encima de lo previsto, mantiene en vilo a los mercados y a los responsables de la política monetaria, quienes deberán equilibrar el estímulo a la actividad económica con la estabilidad de precios.