Israel lanza ataque masivo contra Irán tras casi cinco décadas de tensiones: se agrava el conflicto en Medio Oriente
Por Luis Moreno
En la madrugada de este viernes, Israel ejecutó un ataque aéreo a gran escala contra objetivos militares y nucleares en Irán, marcando un punto de inflexión tras casi cinco décadas de hostilidades latentes entre ambos países. La ofensiva, considerada la más contundente desde la Revolución Islámica de 1979, dejó al menos 70 muertos y más de 300 heridos, entre ellos varios altos mandos militares iraníes y científicos nucleares.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, justificó la acción al afirmar que “el tiempo para detener a Irán se estaba agotando” y acusó al régimen de Teherán de avanzar en la militarización de su programa nuclear. Según Tel Aviv, el enriquecimiento de uranio por parte de Irán alcanza niveles cercanos al grado armamentístico.
Una guerra en la sombra que estalló
El conflicto entre Irán e Israel, que por décadas se mantuvo en un escenario de operaciones encubiertas y sabotajes, se intensificó tras el ataque de Hamás a Israel en octubre de 2023. Esta acción desencadenó una respuesta militar israelí que debilitó al denominado “Eje de la Resistencia”, una red de aliados regionales de Irán que incluye a Hezbollah, los hutíes en Yemen y el régimen sirio, hoy derrocado.
Los ataques de hoy incluyeron bombardeos sobre instalaciones críticas como la planta de enriquecimiento de uranio de Natanz, el complejo militar de Parchin y la instalación subterránea de Fordó, al sur de Teherán. Medios iraníes confirmaron la muerte del general Hossein Salamí, comandante en jefe de la Guardia Revolucionaria, y del general Amir Ali Hajizadeh, jefe de su fuerza aeroespacial. También fallecieron el jefe del Estado Mayor, el general Mohamad Hosein Baqerí, y seis científicos nucleares clave.
La respuesta de Irán: promesa de venganza
El líder supremo iraní, Ali Jameneí, condenó enérgicamente los ataques y prometió una «respuesta amarga y dolorosa» contra Israel. En tanto, el presidente Masud Pezeshkian anunció una «poderosa represalia», mientras que el ministro de Exteriores, Abbas Araqchi, calificó los bombardeos como una «declaración de guerra».
Horas después de la ofensiva, Irán respondió lanzando más de un centenar de drones contra territorio israelí, la mayoría de los cuales fueron interceptados, según reportes preliminares.
La comunidad internacional pide contención
Ante la escalada bélica, líderes mundiales han llamado a reducir tensiones. El secretario general de la ONU, António Guterres, instó a ambas naciones a “cesar las hostilidades de inmediato”. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, calificó los hechos como “alarmantes” y pidió “máxima moderación”. China y Rusia también se sumaron a los llamados diplomáticos.
Aunque Estados Unidos reafirmó su alianza con Israel, el secretario de Estado, Marco Rubio, negó que su país haya participado en el ataque. El presidente Donald Trump, por su parte, lamentó la ruptura del diálogo nuclear con Irán y exhortó a retomar la vía diplomática, pese a haber respaldado previamente las acciones de Netanyahu.
Un punto sin retorno
Este ataque representa la primera ofensiva directa de Israel sobre territorio iraní en casi 50 años y pone en jaque la estabilidad de Medio Oriente. La posibilidad de una guerra abierta entre ambas potencias ya no es un escenario improbable.
Mientras tanto, el mundo observa con preocupación el desarrollo de los acontecimientos que podrían alterar el equilibrio geopolítico de la región y tener consecuencias globales.
