Detienen en el AICM a sacerdote de los Legionarios de Cristo por presunta violación de menor
Por Luis Moreno
La noche del miércoles 11 de junio, agentes de la Unidad de Asuntos Policiales Internacionales e Interpol de la Fiscalía General de la República (FGR) detuvieron en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) a Antonio María Cabrera, sacerdote de la congregación Legionarios de Cristo, acusado de violación agravada en contra de un menor de edad.
El sacerdote fue entregado a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), que encabeza la investigación del caso. Según fuentes federales, Cabrera es señalado por el delito de violación con complementación típica y punibilidad autónoma, agravada por haber sido cometida por una persona con una relación de confianza con la víctima.
De acuerdo con la denuncia, los hechos habrían ocurrido hace aproximadamente 20 años. La congregación Legionarios de Cristo confirmó la detención y, a través de un comunicado, aseguró estar en disposición de colaborar con las autoridades civiles para el esclarecimiento del caso, aunque señalaron que no han recibido información oficial directa sobre el proceso judicial.
“Desde que nos enteramos del hecho, hemos intentado esclarecer la situación (…) Estamos en plena disposición para colaborar con las autoridades civiles para el esclarecimiento de la denuncia”, indica el comunicado.
Antonio Cabrera, además de ser miembro de los Legionarios de Cristo, fue titular de la Facultad de Bioética en la Universidad Anáhuac, una de las instituciones educativas más representativas vinculadas a la congregación.
Este caso se suma a la ya extensa lista de denuncias y escándalos por abuso sexual que han golpeado durante décadas a los Legionarios de Cristo, orden fundada por Marcial Maciel, también acusado de múltiples abusos contra menores y jóvenes seminaristas.
Las autoridades no han ofrecido mayores detalles sobre el desarrollo del proceso penal, pero la FGJEM ha solicitado a posibles víctimas adicionales presentarse a declarar si han sufrido situaciones similares.
La detención de Cabrera reaviva el debate sobre la rendición de cuentas dentro de instituciones religiosas y la necesidad de transparencia en casos de abuso sexual infantil.