Convocan a vigilia y luto nacional por hallazgo de crematorios clandestinos en Teuchitlán
Por Luis Moreno
El reciente hallazgo de un campo de exterminio en Teuchitlán, Jalisco, ha generado conmoción en todo el país. Ante esta situación, diversos colectivos y organizaciones de derechos humanos han convocado a una vigilia y un día de luto nacional el próximo sábado 15 de marzo en varias ciudades de México.
Hallazgo macabro en Teuchitlán
El colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco reveló el pasado 6 de marzo el descubrimiento de un predio en el municipio de Teuchitlán donde se realizaban cremaciones clandestinas. En este lugar, conocido como rancho Izaguirre, se encontraron al menos tres hornos utilizados presuntamente por el crimen organizado para incinerar cuerpos. Días después, la Fiscalía de Jalisco confirmó la existencia de seis lotes con restos óseos en cuatro espacios distintos dentro del predio.
Según información oficial, el rancho Izaguirre había sido asegurado por la Guardia Nacional desde el 18 de septiembre de 2024 y estaba identificado como un centro de reclutamiento forzado y entrenamiento del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Convocatoria a la vigilia
El Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh), en conjunto con los colectivos Huellas de la Memoria y Red Regional de Familias Migrantes, convocaron a una vigilia en el Zócalo de la Ciudad de México y en otras ciudades como Monterrey, Guadalajara, Querétaro, Saltillo, Torreón, Colima, Zacatecas, Morelia y Fresnillo.
La manifestación, que comenzará a las 17:00 horas, busca visibilizar la crisis de desapariciones en México y exigir justicia para las víctimas. Como parte del acto simbólico, se colocarán más de 400 pares de zapatos y 400 velas en honor a las personas desaparecidas y asesinadas en el rancho Izaguirre.
«Lleva una vela y un par de zapatos, como signo de protesta», piden las organizaciones convocantes.
Denuncias contra la omisión del gobierno
El Centro Prodh denunció que, pese a la magnitud de la crisis de desapariciones en México, el gobierno federal ha priorizado la manipulación de cifras en lugar de fortalecer las instituciones encargadas de la identificación forense y la búsqueda de personas. Además, señalaron que la federación ha dejado en manos de cada estado el manejo del problema, lo que ha empoderado a las fiscalías locales y limitado la colaboración con organismos internacionales.
«La conmoción que ha causado el hallazgo en Jalisco debería llevar a una revisión profunda del tema. La Federación no puede esquivar su responsabilidad dejando todo en los estados. Sigue faltando una política de Estado frente a la crisis de desapariciones», expresó el Centro Prodh en un comunicado.
Investigación de la FGR
El pasado 11 de marzo, la Fiscalía General de la República (FGR) anunció que abrirá una investigación para esclarecer los hechos y determinar responsabilidades antes de atraer el caso a la esfera federal. Alejandro Gertz Manero, fiscal general, calificó el hallazgo como «muy crítico y grave», y cuestionó cómo un centro de exterminio pudo operar sin que las autoridades locales o estatales tuvieran conocimiento.
«No es creíble que una situación de esa naturaleza no haya sido conocida por las autoridades locales o estatales», afirmó Gertz Manero, y agregó que la FGR investigará los antecedentes del predio, los propietarios y cualquier red de protección que haya permitido su operación.
Exigen acción inmediata
Los colectivos de madres buscadoras, activistas y organizaciones de derechos humanos reiteraron su llamado a que el gobierno mexicano implemente una estrategia efectiva para abordar la crisis de desapariciones forzadas y la violencia generalizada. Insisten en que el hallazgo de fosas clandestinas, crematorios ilegales y sitios de exterminio es una muestra de la magnitud del problema que enfrenta el país y que requiere un enfoque integral y coordinado a nivel nacional.
La vigilia del 15 de marzo busca ser un recordatorio de las miles de víctimas de desaparición en México y una exigencia de justicia para quienes han sido silenciados por la violencia. «Contra el horror y el infierno, no nos callaremos», sostienen los organizadores.



