Billboard elige a Beyoncé como la mejor estrella pop del siglo XXI

Por Lolis Moreno

La revista Billboard, considerada una de las publicaciones más influyentes en el mundo de la música, ha nombrado a Beyoncé como la mejor estrella pop del siglo XXI, destacando su impacto, influencia y evolución artística a lo largo de 25 años de carrera. En una lista publicada recientemente, que incluye a los 25 artistas más destacados desde el cambio de milenio, la cantante de Houston ocupa el primer lugar, por encima de figuras como Taylor Swift, quien ocupa el segundo puesto, y Rihanna, que se coloca en el tercero.

Billboard reconoce que Taylor Swift es una de las estrellas más grandes del pop del siglo XXI, especialmente si se toman en cuenta sus logros en términos de ventas de álbumes y récords de afluencia a sus giras. Sin embargo, la publicación resalta que lo que sitúa a Beyoncé en la cima de esta lista es su capacidad para trascender las tendencias del momento y mantenerse a la vanguardia del pop durante más de dos décadas. Según Billboard, la artista ha sido una «creadora constante de éxitos» que ha moldeado y redefinido el panorama musical en cada etapa de su carrera.

Beyoncé, quien inició su camino en la música como parte del exitoso grupo Destiny’s Child, comenzó su carrera en solitario en 2003 con su álbum Dangerously In Love, que la catapultó a la fama mundial. Desde entonces, ha lanzado varios álbumes aclamados por la crítica, ha batido múltiples récords y ha conquistado los escenarios de todo el mundo. Su compromiso con la innovación en cada uno de sus proyectos ha sido clave para su longevidad y relevancia en el mundo del entretenimiento.

La revista destaca su capacidad para mantenerse en constante evolución, siendo una artista multifacética que se ha destacado no solo por su poderosa voz y su impresionante presencia en el escenario, sino también por su creatividad y su habilidad para abordar diversos géneros musicales. Beyoncé ha sido una figura pionera en el entretenimiento, influyendo en la cultura pop y sirviendo de referente para futuras generaciones de artistas.

Además de su éxito comercial, que incluye 32 premios Grammy y 11 canciones en el puesto número uno del Hot 100, Beyoncé también ha sido reconocida por su capacidad para fusionar la música pop con el arte visual, la moda y la cultura política, convirtiéndose en una voz influyente en la lucha por los derechos civiles y la igualdad. Su álbum Lemonade (2016) es un claro ejemplo de su enfoque innovador, fusionando música, cine y poesía para crear una obra maestra que se mantuvo en la vanguardia de la crítica y el público.

En la lista de Billboard, que destaca a los artistas más importantes de las últimas dos décadas y media, Beyoncé no solo se enfrenta a otros artistas como Taylor Swift, Rihanna y Lady Gaga, sino también a estrellas del rap como Drake y Kanye West, y figuras del pop como Justin Bieber, Ariana Grande y Britney Spears. La revista también incluye a dos artistas latinos: Shakira, quien ocupa el puesto 17, y Bad Bunny, que se sitúa en el puesto 23. La inclusión de estos dos artistas subraya cómo la música latina ha logrado integrarse al mainstream global, algo que Shakira, en particular, ha logrado desde principios de los 2000, mientras que Bad Bunny, en solo seis años, se ha consolidado como una de las personalidades más influyentes del pop mundial.

Billboard resalta el impacto de Shakira en la música global, especialmente en la forma en que los artistas latinos comenzaron a conquistar las listas internacionales en varios idiomas, mientras que Bad Bunny ha revolucionado la música urbana, convirtiéndose en un ícono cultural a nivel mundial.

El reconocimiento de Beyoncé como la mejor estrella pop del siglo XXI por parte de Billboard no solo celebra su éxito musical y comercial, sino también su capacidad para reinventarse y dejar una huella perdurable en la industria. Con más de 80 millones de álbumes vendidos y una vasta lista de éxitos, la cantante sigue siendo una de las artistas más influyentes de la historia de la música, y su legado continúa expandiéndose.