Alejandro Armenta Mier: Un Legado de Compromiso y Superación en la Política de Puebla
Por Griss Moreno
El gobernador electo Alejandro Armenta Mier rinde homenaje a su mentor, el presidente municipal de Acatzingo, don Gilberto Camacho, durante un emotivo evento que resalta su trayectoria política y su cercanía con la ciudadanía. A sus 22 años, Armenta Mier asumió su primera responsabilidad pública, respaldado por un grupo de jóvenes y mujeres con quienes emprendió proyectos enfocados en el deporte, la educación y el acceso al agua.
“Don Gil, aquí está su chamaco, quien hoy es gobernador”, expresó Armenta Mier, recordando cómo su mentor le brindó las primeras oportunidades en su carrera política. Camacho, de 86 años, ha sido un pilar fundamental en la vida pública de Armenta, quien reconoce su influencia en el inicio de su trayectoria.
Durante su trienio en Acatzingo, Armenta Mier enfrentó desafíos significativos, incluidas manifestaciones por parte de figuras políticas como Ana Tere Aranda, Paco Frayle y Lalo Rivera, que complicaron su gobernanza. Sin embargo, Armenta Mier relató que el apoyo de la ciudadanía fue crucial en esos momentos difíciles.
El gobernador electo también abordó las experiencias traumáticas que marcaron su formación. “Hubo de todo: pistolas, pedradas, jitomatazos… pero la gente nos respaldaba”, relató. La violencia que experimentó durante su toma de protesta lo llevó a adoptar una actitud vigilante, una característica que lo mantiene alerta y en constante búsqueda de la seguridad del pueblo.
Armenta Mier enfatiza que su formación como político se dio en contacto directo con la sociedad. “Todo eso lo aprendes cuando estás en la base, como dice el presidente Andrés Manuel y la Doctora Claudia Sheinbaum, cuando tienes conexión directa con la sociedad; descubrí mi vocación al lado de gente grande, gente adulta, en asambleas educativas, en la atención a los más vulnerables, y así aprendí el arte de gobernar, esa fue mi primera escuela”, afirmó. Su compromiso con las nuevas generaciones de jóvenes es claro, abriendo puertas y oportunidades para que continúen avanzando en la vida pública.
Con un fuerte sentido de gratitud hacia aquellos que creyeron en él, Alejandro Armenta Mier concluyó: “Honro las oportunidades que me dieron y replico ese apoyo. Estoy aquí para que nuevas generaciones sigan avanzando”. Su historia es un testimonio de perseverancia y dedicación, reflejando la importancia de la conexión con la comunidad en la política.
