Sven-Göran Eriksson: Un Adiós Desde el Corazón del Fútbol
Por Griss Moreno
El exentrenador de la Selección Mexicana de Fútbol, Sven-Göran Eriksson, enfrenta sus últimos días con dignidad y reflexión, tras ser diagnosticado con cáncer de páncreas en fase terminal a principios de 2024. A los 76 años, Eriksson ha utilizado su plataforma para despedirse del mundo a través de un emotivo documental producido por Amazon Prime Video.
En el documental, titulado «Sven-Göran Eriksson: Un Adiós al Fútbol», el exentrenador sueco comparte su experiencia personal y profesional mientras enfrenta la enfermedad que le han dado una esperanza de vida de solo un año. Eriksson, conocido por su carrera internacional y su paso por la Selección Mexicana en 2008, ofrece un mensaje de reflexión y gratitud.
“La vida también se trata de la muerte, tienes que aprender a aceptarla. Con suerte, al final la gente dirá: ‘Sí, era un buen hombre’. Pero no todo el mundo dirá eso. Tuve una buena vida. No se arrepientan. Sonrían. Gracias por todo, entrenadores, jugadores y público. Ha sido fantástico. Cuídense y cuiden su vida. ¡Y vívanla! Adiós”, expresa Eriksson en un desgarrador mensaje final.
El exentrenador, quien también dirigió a Inglaterra y a varios clubes importantes en Europa, subraya en el documental cómo ha aprendido a enfrentar la adversidad con una mentalidad positiva. “Los médicos no saben desde cuándo estoy así. Puede ser un mes o un año. Ahora puedes engañar a tu cerebro. Ver lo positivo de las cosas y no dejarte llevar por la adversidad, porque ésta es, por supuesto, la mayor adversidad a la que me he enfrentado. Pero puedo hacer algo bueno con ello”, reflexiona.
Eriksson, cuyo mandato con la Selección Mexicana en 2008 estuvo marcado por resultados desalentadores que eventualmente llevaron a su destitución, ha sido un personaje influyente en el fútbol mundial. A pesar de sus desafíos en México, donde el equipo no logró clasificar de manera cómoda al Mundial de Sudáfrica 2010, su legado en el deporte es innegable.
Con la publicación de este documental, Eriksson no solo se despide del fútbol, sino que también ofrece un último mensaje de esperanza y fortaleza a sus seguidores y seres queridos. Mientras la enfermedad sigue su curso, el exentrenador sueco deja una huella imborrable en el mundo del deporte, recordado por su actitud positiva y su dedicación inquebrantable al juego que amó.
