Internacional

Israel: Tribunal Supremo Dictamina Fin de Exención Militar para Estudiantes Ultraortodoxos

El Tribunal Supremo de Israel ha emitido una histórica resolución que pone fin a la exención militar para los estudiantes de seminarios judíos ultraortodoxos, conocidos como yeshivot, en medio de un prolongado debate nacional y tensiones políticas.

La decisión, tomada por unanimidad de los 9 magistrados, representa un cambio significativo en la política israelí, donde los ciudadanos judíos no ultraortodoxos están obligados a cumplir con el servicio militar obligatorio. Esta medida había sido motivo de discordia durante décadas, exacerbada por la actual guerra en Gaza y la necesidad de un reparto equitativo de la carga en seguridad, según líderes militares israelíes.

El fallo judicial implica que potencialmente miles de hombres ultraortodoxos podrían ahora ser reclutados para el servicio militar, un paso que desafía directamente las posiciones de poderosas coaliciones ultraortodoxas en el gobierno, como Shas y Judaísmo Unido de la Torá (JUT). Estos partidos, que tienen 18 escaños en el parlamento y brindan apoyo crucial al primer ministro Benjamin Netanyahu, han amenazado con abandonar la coalición si se implementa la medida.

Moshe Gafni, líder del JUT y diputado, expresó su descontento con el fallo: «No hay un solo juez allí que entienda el valor del estudio de la Torá y su contribución al pueblo de Israel». Similarmente, Aryeh Deri, líder del Shas, declaró que «no hay poder en el mundo que pueda impedir que el pueblo de Israel estudie la Torá».

La resolución también incluye un congelamiento de la financiación pública para los seminarios judíos cuyos estudiantes evadan el servicio militar obligatorio, lo que intensifica la presión sobre Netanyahu y su gobierno.

La exención militar para los ultraortodoxos no es una ley, sino una disposición ejecutiva renovada periódicamente, cuyo último acuerdo legal expiró recientemente. Esto llevó al Tribunal Supremo a abordar el caso, provocando reacciones encontradas entre los defensores y críticos de la medida.

Shmuel Horowitz, abogado que representó a una asociación de yeshivot ante el tribunal, expresó su decepción: «Los tribunales no son el foro adecuado para resolver este tipo de cuestiones sociales». Sin embargo, la decisión del Tribunal Supremo ha sentado un precedente significativo en la política israelí, con repercusiones que podrían desencadenar una crisis política y la posibilidad de nuevas elecciones en un momento de incertidumbre política y desafíos internos.

El impacto a largo plazo de esta decisión continúa siendo objeto de debate en Israel, donde las tensiones entre la seguridad nacional y las libertades religiosas siguen siendo un tema central en la sociedad y la política.

LM

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