Polémica en la Premier League por los brazaletes arcoíris: decisiones religiosas y posibles sanciones
Por Griss Moreno
La campaña Rainbow Laces, organizada por la Premier League para promover la inclusión y el apoyo a la comunidad LGBTQ+, generó controversias este fin de semana. Mientras 18 de los 20 capitanes de los equipos portaron brazaletes con la bandera arcoíris, Sam Morsy, del Ipswich Town, y Marc Guehi, del Crystal Palace, tomaron decisiones que han abierto el debate público.
La postura de Sam Morsy
Morsy, internacional por Egipto y musulmán practicante, decidió no llevar el brazalete, argumentando motivos religiosos. Su equipo, el Ipswich Town, respaldó públicamente la iniciativa de inclusión de la Premier League, pero también expresó su respeto hacia la decisión personal de su capitán.
“El Ipswich Town Football Club se compromete a ser un club totalmente inclusivo y damos la bienvenida a todos. Respetamos la decisión de Morsy basada en sus creencias religiosas”, señaló el club en un comunicado.
El mensaje de Marc Guehi
Por su parte, Marc Guehi, capitán del Crystal Palace y cristiano devoto, sí usó el brazalete arcoíris, pero escribió con plumón las palabras “Amo a Jesús” sobre él, reemplazando la palabra “amor” con un corazón. Esta acción podría generar una sanción por parte de la Federación Inglesa (FA), ya que las reglas prohíben mensajes religiosos, políticos o personales en las equipaciones deportivas.
Aunque la FA no ha tomado medidas disciplinarias inmediatas contra Guehi, sí recordó al jugador y al club sus responsabilidades en el marco de las normas vigentes.
Contexto de la campaña
Rainbow Laces, lanzada en 2013 en colaboración con la organización benéfica LGBTQ+ Stonewall, busca fomentar el diálogo y la alianza con la comunidad LGBTQ+ a través de acciones visibles en los estadios, como banderines de esquina y bases para balones con los colores del arcoíris.
La jornada estuvo marcada por la atención mediática que estas decisiones generaron, destacando la necesidad de equilibrar el respeto por las creencias personales y la promoción de la inclusión. Curiosamente, Ipswich Town y Crystal Palace se enfrentarán este martes, lo que añade un componente deportivo a la controversia.
Un precedente en la Premier
No es la primera vez que un capitán rechaza el brazalete arcoíris. Anel Ahmedhodzic, del Sheffield United, se negó a portarlo la temporada pasada, convirtiéndose en el primer caso en siete años.
La campaña, vigente hasta el 5 de diciembre, sigue desatando un debate sobre los límites entre lo personal, lo religioso y lo inclusivo en el deporte.
